Consejos para calmar a tu gato durante un viaje
Primero piensa: ¿necesitas viajar con tu gato?
¿Se avecina un gran viaje, una mudanza o vacaciones?
Viajar puede ser una gran aventura para las personas, ¡pero a nuestros amigos felinos no suele entusiasmarles! Para los gatos, cualquier cambio en su rutina o entorno normal puede ser causa de estrés o preocupación. Por esa razón, aunque siempre queremos que nuestras mascotas vengan con nosotros, es importante considerar si el viaje es realmente lo mejor para tu gato o si un cuidador de gatos o un alojamiento felino puede ser la mejor opción para él.
Si vas a tomarte un descanso, como unas vacaciones, a menudo es mejor dejar a tu gatito, aunque lo eches de menos. Pero si el viaje es solo de ida, por supuesto que tu gato irá contigo.
Es importante planificar el viaje con tu gato con antelación. Con el apoyo y la preparación adecuados, es posible reducir el estrés del gatito y facilitar el viaje.
Consejos para calmar a tu gato durante el viaje
Empieza con la transportadora
Independientemente de cómo planees viajar con tu mascota, deberá mantenerse segura dentro de su transportadora. Para ayudar a reducir el estrés relacionado con el viaje, ayuda a tu gatito a desarrollar una asociación positiva con su transportadora. Si la única vez que lo ven es en una visita aterradora al veterinario, ¡que no te sorprenda si se muestra reacio!
En casa, coloca la transportadora en un área en la que se sienta seguro. Deja la puerta abierta y coloca mantas acogedoras dentro. Luego, deja que tu gato lo explore a su propio ritmo. ¡Poner un premio o un juguete dentro puede animarle! Con el tiempo, tu gato debe tener la confianza suficiente en la transportadora, tanta como para no importarle que cierres la puerta. Hazlo poco a poco, gradualmente. Así le ayudarás a sentirse tranquilo mientras está dentro de la transportadora, con la puerta cerrada y en marcha.
Usar FELIWAY Classic Spray en las mantas dentro de la transportadora también puede ayudar a que tu gato se sienta seguro y feliz durante el acercamiento a su transportadora.
Consulta con tu veterinario
Si viajas a donde sea, asegúrate de que tu gato está en forma, saludable y es capaz de lidiar con el estrés de trasladarse. Si su gatito está enfermo o tiene problemas de salud subyacentes, ten en cuenta que viajar puede empeorarlo.
Verifica que tu mascota esté sana y lo suficientemente bien como para desplazarse antes de hacer cualquier viaje. Ten en cuenta que las vacunas de tu gato deben estar actualizadas antes de viajar para reducir cualquier riesgo de infección, y si planeas viajar en avión, tu aerolínea y el destino de llegada pueden requerir ciertos certificados de salud y vacunación. ¡Asegúrate de estar preparado con mucha anticipación!
Consejos para calmar a tu gato
- Usa la transportadora adecuada. Hay muchas consideraciones a tener en cuenta a la hora de elegir una transportadora que ayude a tu gato a sentirse más tranquilo. Asegúrate de que tu gato pueda tumbarse dentro, estirarse y darse la vuelta fácilmente. El uso de una transportadora rígida también puede ayudar a proteger a tu mascota. Elegir una transportadora con aberturas y cierres a los lados (en lugar de la parte superior) puede ayudar a reducir el mareo. ¡Cúbrelo con mantas acogedoras, periódicos y tu gatito estará listo para que se vayan juntos!
- Facilítale un arenero. Todos necesitamos ir al baño cuando viajamos durante mucho tiempo. Si estás haciendo un viaje corto, es posible que tu mascota espere pero prepárate con periódicos de repuesto y materiales de limpieza para cualquier “accidente” de lavabo. Para los viajes de larga distancia, lleva un arenero y ofrece descansos frecuentes a tu mascota para ir al baño. Así le ayudarás a que el viaje sea más cómodo.
- Mantén a tu gatito hidratado. Los descansos para refrescarse son una parte importante del viaje. Lleva agua en abundancia para tu gato y ofrécesela durante paradas regulares. Es mejor no dejar su plato de agua en la transportadora, porque se derramará. Para tranquilizar a tu gatito, también puede ayudar traer agua de tu casa: el agua puede oler y tener un sabor diferente en otros lugares y eso puede estresar a tu gato.
- Evita darle de comer durante el viaje. Evita darle de comer justo antes o durante el viaje para que tu gato no se maree. Una vez que llegues a tu destino, asegúrate de que tu mascota tenga acceso a su comida habitual. Puede tomarse un tiempo para instalarse y tardar un poco en sentir hambre. Ten paciencia si no quiere comer de inmediato.
- Ten en cuenta el clima. Mantener a tu gato a una temperatura agradable puede hacer que su viaje sea mucho más fácil. En verano, el viaje puede ser muy caluroso, así que lleva bolsas de hielo o botellas de agua congeladas en un refrigerador. Si no hay aire acondicionado, puedes colocar una bolsa de hielo fría, envuelta en un paño, dentro del transportín para mantener a tu gato fresquito. En invierno, asegúrate de que tu gato tenga muchas mantas extra.
- Cansa un poco a tu gato. Ejercitar a tu gato antes de viajar con una divertida sesión de juego no solo puede ayudarlo a sentirse feliz y calmado, sino que puede ayudar a cansarlo para que pueda dormir durante el viaje. Es más probable que un gatito cansado se relaje y se sienta menos agitado durante el trayecto.
- Lleva todos los recursos que tu mascota necesita. ¿Cuál es el destino? ¿Es un lugar apto para gatos? ¿Tu minino tendrá acceso a todos los recursos que necesita y tiene en casa, como su comida habitual, un rascador, una bandeja de arena o una cama que le sea familiar? Asegúrate de que sea así, por su bienestar.
Cuando viajes en coche también deberías:
- Ayuda a tu gato a sentirse seguro cerca del coche: permítele explorar dentro del vehículo mientras está estacionado para que se acostumbre a los olores.
- Prueba algunos viajes cortos de práctica en los días y semanas antes del viaje.
- Asegúrate de que la transportadora esté bien abrochada con el cinturón de seguridad.
- Conduce con el mayor cuidado posible para evitar sacudidas repentinas y mantén el ambiente del coche tranquilo y relajado con la radio a poco volumen.
- Mantén a tu gatito dentro de la transportador en todo momento mientras conduzcas. Dejar salir a tu gato puede ser peligroso y está prohibido en la mayoría de los países.
- Haz paradas periódicamente por su comodidad y dale agua cada 2 o 3 horas en viajes largos. Si dejas salir a tu gato de la transportadora, asegúrate (solo mientras está el coche aparcado), de que todas las puertas y ventanas estén cerradas para evitar fugas.
- ¡Nunca dejes a tu gato solo en el auto!
En el transporte público:
- Mantén a tu gato dentro de la transportadora en todo momento. Usa una placa, collar o arnés de identificación, además de una correa si necesitas abrir la transportadora. La correa facilita que agarres a tu gato en el caso de que decida intentar escapar.
- Tranquiliza a su mascota con sonidos relajantes durante el viaje.
- Al igual que con el viaje en coche, intenta parar para que tu gato pueda beber agua.
- Cubrir la transportadora con una manta puede ayudar a minimizar el estrés causado por estímulos visuales.
- Llega puntual para que el viaje sea lo más tranquilo posible.
En vuelos:
- Consulta con tu aerolínea con meses de anticipación. Algunas aerolíneas tienen requisitos específicos de tipo y tamaño de transportadora o pueden no permitir mascotas. Siempre necesitarán saber por adelantado que planeas traer a tu gato para poder asesorarte.
- Asegúrate de que tu mascota cumple con los requisitos médicos: consulta con tu veterinario qué vacunas, documentación e identificación de viaje debe tener tu gato.
- Comprueba que tu ubicación de destino te permite llevar a tu gatito contigo.
- Llega al aeropuerto con mucha anticipación el día del viaje, ya que el registro con una mascota puede demorar más.
Otras consideraciones de viaje a tener en cuenta
Viaja siempre con identificación y documentos en regla
Asegúrate de que tu gato lleva identificación todo el tiempo que viaje. Puede llevarla en un collar o arnés con su nombre, número y dirección. Tu mascota también debe llevar su microchip, así que si no se lo has puesto, pónselo antes de viajar. Lleva copias de la documentación de viaje y los certificados de tu mascota con su transportadora en todo momento. Especialmente para viajes aéreos, asegúrate de consultar con un veterinario en caso de que se necesiten ciertas vacunas o un certificado de salud antes de viajar.
Comprueba tu destino
Si te hospedas en algún sitio, ya sea en un hotel, con amigos o en otro lugar, comprueba con anticipación que está permitido traer a tu gato y que sea seguro hacerlo. Nunca intentes alojar a tu gato de forma oculta. Los hoteles tienden a aceptar mascotas más que antes y algunos anuncian que admiten mascotas, así que incluso te proporcionarán algunos de los recursos que necesita tu amigo felino.
Una vez que llegues a tu destino, es buena idea hacer una revisión rápida de seguridad antes de dejarlo salir de la transportadora. Comprueba que no haya ventanas o puertas abiertas, investiga la habitación para asegurarte de que no haya nada que pueda dañar a tu mascota, como un armario abierto donde podría quedar atrapado.
Una vez estés seguro de que no es peligroso, asigna un espacio seguro para tu mascota, como una habitación tranquila o un rincón, con un poco de agua y su cama. Luego deja que tu gato salga, a su ritmo. No te preocupes si se toma un tiempo. Todavía puede sentirse inquieto por el viaje y necesitan su tiempo para recuperarse.
Si no puedes llevar a tu amigo peludo contigo, tienes otras opciones. Puedes dejarlo con un cuidador para que atienda a tu gatito en casa o llevar a tu gato a una residencia felina durante el tiempo que dure el viaje.
El uso del difusor clásico FELIWAY puede ayudar a que tu mascota se sienta segura mientras se adapta a la nueva ubicación. Al liberar mensajes relajantes, puede ayudar a que tu gato se sienta calmado y feliz.